divendres

Mi odisea

Un sí, un vale
un quizás y un puede.
Muchos miedos.

La ilusión capitana,
diosa aliada,
la prudencia vientos
que entorpecen mi marcha,
las dudas tormentas,
las inseguridades cíclopes,
los inconvenientes lotófagos...
y las promesas tentadoras,
como cantos de sirena,
estratagemas de Calipso,
ávidas por anclar.

Yo un Ulises
contra imponente Poseidón,
desprovisto de víveres,
brújula y tripulación.
Tan humano y tan terco,
tan necio, tan adepto
de la obcecación,
que me aferro a mi timón:
un sueño tejido anoche
que me hizo sonreír.